Las Vigilias de Enlázate por la Justicia de este año están generando espacios de diálogo, en línea con la reflexión que desde la Conferencia Episcopal se lanzó de cara a las Semanas Sociales diocesanas. Estas vigilias plantean el diálogo como instrumento para el cuidado, dentro del enfoque de CUIDAdanía Integral. En un mundo sin diálogo verdadero no hay posibilidad de avanzar en la solución de los problemas sociales, por lo que las personas más vulnerables sufren las mayores consecuencias.
El 14 de junio le tocó el turno a Madrid, dentro de las distintas ciudades (Badajoz, Palma, Sevilla…) en que se está celebrando la Vigilia de Enlázate por la Justicia. Nos reunimos en la Parroquia de S. Francisco Javier en el popular barrio de Ventilla, con la participación de Fernando Fuentes, secretario de la Comisión de Pastoral Social y Promoción Humana de la CEE y Rufino García, delegado de Migraciones de la diócesis de Madrid.
A partir del texto evangélico del encuentro entre la mujer cananea y Jesús, compartimos tres meditaciones que resaltaban aspectos del cuidado de la propia persona (espiritualidad), del otro (fraternidad) y de la Casa Común (ecología integral). Y abrimos un diálogo en grupos de tres personas sobre cuestiones como estas: ¿Es la identidad cristiana algo cerrado o fijo? ¿Cómo puede la Iglesia impulsar el diálogo en la sociedad? ¿Qué le pediríamos y que aportaríamos al diálogo político para lograr una convivencia que construye el bien común?
El tiempo de diálogo se quedó corto, y al concluir nos intercambiamos las palabras que recogían lo que estábamos experimentando, palabras como apertura, escucha activa y profunda desde la diversidad, acogida, superar barreras…
Salimos de la Vigilia con el reto de seguir generando espacios para el diálogo, partiendo de una conversión personal que nos abre a incorporar puntos de vista de las otras personas, y con la audacia para no dejarnos encerrar por los muros de la polarización.
