Al conocer su fallecimiento, las personas que compartieron parte de su camino han recordado su sonrisa pícara, sus eucaristías, sus frases destacadas, la trayectoria de su ONG Pan y Peces… Y por supuesto, la reivindicación del 0,7% del PIB para Cooperación al Desarrollo que en 1993 él impulso junto a otros compañeros, llegando a la huelga de hambre.

Las personas hoy en la Junta Directiva de REDES, jovencitos en esos años, destacaron enseguida cómo la profecía que encarnaba Repullés les marcó profundamente, y orientó sus vidas. Aquel gesto, y su trayectoria vital, nos sacudió, nos abrió a mirar la realidad lacerante del hambre en el mundo, descrita en aquellos años con términos como subdesarrollo o tercer mundo, y nos dio nuestra primera experiencia de movilización social, acampando en las calles durante semanas, en la confianza de que „las cosas podían cambiar“. Y todo ello, desde la fe en Jesús.

En ese humus social y eclesial surgieron muchas de las ONG que hoy forman parte de REDES. Y diez años después, fue cristalizando REDES como un espacio de comunión en la Incidencia Política, participando en la campaña 0,7 Reclámalo junto a la Coordinadora de ONGD. Este 2023 se inició con la aprobación por amplio consenso de la nueva Ley de Cooperación, que refrenda el compromiso de llegar a esa cifra tan simbólica para todos nosotros.

Javier Repullés aunó el servicio a las personas pobres, la denuncia de las estructuras injustas que generan su pobreza, y la propuesta de alternativas sociales para superarla. REDES quiere ser fiel a este testigo del Evangelio, y seguir recibiendo aliento desde ese cachito de cielo en el que hoy habita Javier.