Gracias por este pastor

Este lunes de Pascua despedimos con tristeza al papa Francisco. Y por encima de todo, un entrañable agradecimiento por su ministerio. ¡Cuánto hemos aprendido de él! Un pastor con olor a oveja, pastor de misericordia, de denuncia profética. Maestro con palabras necesarias en medio de la crisis de época que atraviesa la Humanidad. Nadie se salva solo, todo está conectado, caridad política, sinodalidad, y tantas otras que iluminan el camino de las organizaciones de Iglesia por la justicia global. Recordamos también especialmente el Sínodo de la Amazonía y su llamado al Pacto Educativo Global.

En su último mensaje Urbi et Orbe volvió a alzar la voz frente al estruendo de las armas y por la acogida de las personas migrantes.

Gracias Señor por este pastor.