Consenso por una Cooperación transformadora

El 21 de diciembre, en vísperas de Navidad y en días oscuros de política bronca, pasa de puntillas por los medios que el Senado aprueba por consenso entre los partidos mayoritarios la nueva Ley de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global.

Además de alabar esta ley que modernizará nuestro sistema de Cooperación y agradecer el impulso para su consecución de la Coordinadora de Organizaciones para el Desarrollo (destacando la participación de Entreculturas, Cáritas, y unas cuantas más entidades de Iglesia), queremos resaltar este hito de diálogo y buena política para construir sistemas que beneficien realmente a las poblaciones vulnerables y garanticen sus derechos.

La encíclica Fratelli Tutti dedica su capítulo V a la mejor política. Difícil condensar en frases la hondura e impulso que suponen para la reflexión de las organizaciones sociales. En su número 186 dice: Hay además un amor “imperado”: aquellos actos de la caridad que impulsan a crear instituciones más sanas, regulaciones más justas, estructuras más solidarias[181]. De ahí que sea «un acto de caridad igualmente indispensable el esfuerzo dirigido a organizar y estructurar la sociedad de modo que el prójimo no tenga que padecer la miseria».

No caemos en la ingenuidad, no desconocemos que esta ley no resuelve todos los conflictos, que la cooperación seguirá siendo necesaria para caminar hacia la justicia global, pero hoy, en vísperas de la Navidad, queremos que brille esta luz, esa tarde que los partidos del Parlamento se pusieron de acuerdo por el desarrollo sostenible y la solidaridad global.

Coordinadora: Año 0 de la reforma de la Cooperación española. Listos para el año uno.

Entreculturas: 10 motivos para tener una buena ley de Cooperación Internacional.