La cultura del cuidado en el Voluntariado Internacional
Desde la presentación en la Asamblea 2019 de los borradores de documentos que conforman un Sistema de Protección del Menor (Código de Conducta, Protocolo de Actuación, Análisis de Riesgos), se despertó un gran interés entre las socias de REDES, muchas de las cuales desarrollan habitualmente procesos de formación de voluntariado internacional. Aunque este año este tipo de actividad se ha paralizado prácticamente, no ha decaido el interés en aprovechar esta oportunidad. Esto se refleja también en los resultados presentados de la encuesta de voluntariado internacional de REDES. Por eso nuevas entidades, con importante experiencia en voluntariado, han querido sumarse al proceso en el encuentro de este año.
La mejora en el cuidado de menores y personas vulnerables ha sido el objetivo marcado por el grupo de trabajo de voluntariado en estos dos años. La cultura del buen trato, el marco ético, la prevención y el estar preparados ante situaciones que puedan darse en el día a día del voluntariado internacional, ha llevado a generar recursos de apoyo para las entidades interesadas.
Si en todos los ámbitos eclesiales se está avanzando en la cultura del cuidado y la protección, faltaba la concreción en las entidades que envían voluntariado a otros países, que lógicamente desarrollan su actividad tanto con menores como personas en situación de vulnerabilidad. Varios de los asistentes al encuentro manifestaban que la generaración de espacios de buen trato no suele considerarse en las formaciones habituales para voluntariado internacional. El grupo de Voluntariado Internacional de REDES ha venido reflexionando y formándose durante estos dos años para perfilar unos documentos que respondan a la realidad particular con que se encuentra este tipo de voluntariado.
Este esfuerzo ha sido liderado por Miguel Leiva, coordinador de formación de REDES, a través del Aula Virtual en la que se alojan los distintos documentos señalados así como módulos formativos y espacios de trabajo. Concluida esta primera fase de generación de estas herramientas, a partir de ahora esperamos que las entidades que lo necesiten vayan accediendo a ellas y participando en los foros de intercambio para comparir sus pasos en este proceso.
Durante el encuentro surgieron sugerencias concretas para continuar el trabajo insistiendo en la necesidad de formar tanto a las personas voluntarias como a los responsables de su formación y los equipos técnicos y directivos de las entidades:
§ Realizar mini talleres de formación, por ejemplo para identificar y minimizar el riesgo.
§ Incorporar estudios de casos concretos para conseguir un enfoque práctico. Elaborar recursos audiovisuales para las entidades.
§ Organizar grupos de trabajo con las personas interesadas de distintas entidades para compartir experiencias y apoyarse en la elaboración de los distintos documentos del Sistema de Protección.
§ Facilitar el intercambio entre las entidades que empiezan y las que ya tienen una trayectoria.
§ Dar a conocer los recursos disponibles a través de un audiovisual de presentación y una carta a las distintas entidades socias de REDES que motive a implementar un Sistema de Protección.
§ Enmarcar todo el trabajo en la promoción de la cultura del buen trato.
Nos ponemos a disposición para acompañar las necesidades de las entidades.
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